Las cosas por su nombre

No soy afin de hacer este tipo de entradas en el blog, quizas porque nunca senti la necesidad de explayarme mas allà de la poesìa, quizas porque ya me desnudo bastante a travez de ella o simplemente porque soy malo para ambas cosas y no vale aburrirlos gratuitamente.
En mi estadia en España me han pasado todo tipo de cosas, sin ahondar en los hechos laborales de mi viaje, me detendre solo en los hechos que mas valoro y que hicieron que verdaderamente venir hasta aqui valga la pena.
Mi estancia se divide en dos, la actual en casa de una amiga, en Benidorm, Alicante, persona que no solo me dio un espacio entre su sofa y el perro, con el que ya tengo una relacion casi intima, (le ha hecho el amor a mi frazada unas dos veces) me llevo a conocer valencia, a cambio de la receta de la torta de ricotta, me enseño a pelar gambas, a tomar gratis en los bares de la costa. Me regalo perfumes y velas aromaticas, me proporciona datos precisos en donde comprar alfajores argentinos, se arma de paciencia y buena onda cuando a mi se me nublaba el cielo, en fin todas aquellas cosas que hacen los amigos cuando uno mas los necesita.
Pero se abre aqui otra puerta, en Madrid, con dos niñas a las que solo conocia por sus escritos, personas que estaban alli en el espacio de "ver comentarios" al final de lo que volcaba da a ratos en mi espacio bloguero. Ellas simplemente estaban alli, esperandome, con pizza de microondas y horno sin estrenar, pero me abrieron la puerta de sus respectivas casas y se brindaron por completo sin saber mas de mi que lo que se veia publicado.
Si bien los contactos previos y la franqueza con la que escriben habitualmente hacen que uno las sienta mas cercanas, verlas alli, dando animo, espacio y alegrias porque no decirlo, derribò toda cuestion sobre lo que ocultamos cuando nos sentamos a escribir para otros tan anonimos como es uno protegido por un pseudònimo.
Si bien: "cuando uno agradece explaya en palabras lo que su corazon siente" como reza un viejo poema, tambien siento que a veces se dan los "gracias" como los "te amo", con la facilidad de tenerlas en nuestro vocabulario, son palabras cortas y efectivas y si uno encima pone cara de perrito mojado las vuelve certeras.
Para mi hacer este viaje fue una lucha interna casi contra mis principios, pero al llegar aqui encontarme con estas tres personas, todas las necesidades de los afectos que uno suele extrañar se evaporaron al minuto, porque uno extraña cuando se siente solo, y creanme que aqui solo hubos caricias tibias en mi pecho.
Les dejo aqui unas fotos de estas tres hermosas niñas, de las cuales solo podria enamorarme de dos, pues la que resta me sacaria a patadas de su casa al segundo dia.
Gaby, Ele, Cris, tienen en mi un amigo con el que cuentan para toda la vida,
cuando sea, donde sea, por lo que sea.